My grandmother Ina Jane Beeson sits warmly inside my consciousness. As though she is always about my inner atmosphere in her overly warm apartment watching the Weather Channel or tennis. The softness of the light in her apartment, the soft cushions of the rounded wicker furniture in her living room, and the small three-tiered glass case housing tiny objects are all part of her tapestry and influence on my 40-year-old adult life.
She has created a type of miniature glass case, that fits inside my adult life.
Her soft cushions, rounded edges, and chips and dip can’t get far enough inside my presence.
Two weekends ago I had a group of friends over to my roof. The roof is open on all 4 sides and a giant thunderstorm played with us for hours, taunting us and then pulling back. I brought up the giant blue paper lamp my brother and his wife made for their wedding and plugged it in. To my Latin American and Spanish friends, I declared that inside this was my family, joining us.
Then, I offered to cook.
What is the texture of a person that never, ever goes away?
Beachy inner-atmosphere
Mi abuela Ina Jane Beeson se sienta cálidamente dentro de mi conciencia. Como si ella estuviera siempre sobre mi atmósfera interior en su excesivamente cálido apartamento viendo el Weather Channel o jugando al tenis. La suavidad de la luz de su apartamento, los mullidos cojines de los redondeados muebles de mimbre de su salón y la pequeña vitrina de tres niveles que alberga objetos diminutos forman parte de su tapiz y de su influencia en mi vida adulta de 40 años.
Ha creado una especie de vitrina en miniatura, que cabe dentro de mi vida adulta.
Sus suaves cojines, sus bordes redondeados y sus patatas fritas con salsa no caben en mi presencia.
Hace dos fines de semana invité a un grupo de amigos a mi azotea. El tejado está abierto por los cuatro costados y una tormenta gigante jugó con nosotros durante horas, provocándonos y luego retirándose.
Subí la lámpara gigante de papel azul que mi hermano y su mujer hicieron para su boda y la enchufé. A mis amigos latinoamericanos y españoles, les declaré que dentro estaba mi familia, uniéndose a nosotros.
Luego, me ofrecí a cocinar. ¿Cuál es la textura de una persona que nunca, nunca se va?