Yesterday, I was out on my bike passing the port of Nanay, a bustling market on a small port in Iquitos. It´s where one can take boats to nearby communities or buy mangos, bananas, fish, or other snacks.

It was also bustling yesterday. During the quarantine. People selling their Suri worms on skewers as though nothing had changed. I am careful with judging the large sector of the Peruvian workforce with no choice but to leave their houses in order to sell food or buy food each day. I found this tiny universe in the midst of a “visual” lockdown. My jury is out on a solution to all this.

Ayer salí en bicicleta al pasar por el puerto de Nanay, un bullicioso mercado en un pequeño puerto de Iquitos. Es el lugar donde se pueden coger barcas para ir a las comunidades cercanas o comprar mangos, plátanos, pescado u otros bocadillos.

Ayer también estaba animado. Durante la cuarentena. La gente vendiendo sus gusanos Suri en brochetas como si nada hubiera cambiado. Soy prudente a la hora de juzgar al amplio sector de la población activa peruana que no tiene más remedio que salir de sus casas para vender o comprar comida cada día. Encontré este pequeño universo en medio de un cierre "visual". No sé si hay una solución para todo esto.