A couple of days ago I was exhausted and couldn't sleep. It seemed like the perfect metaphor for being human.
There was something about it that had me thinking a few days later.
Yesterday, I was standing in Belen Market in Iquitos attempting to buy some fish from a woman named Blanca. I have met her several times over the past month or so. Behind us was a man manually sharpening knives. His sharpening was so deafening that Blanca had to holler at him to stop so I could decide what fish I wanted.
I find this to also be a good example.
Standing in a place with an intention of doing something with a screeching knife sharpener evading your senses and keeping you from hearing something. The ongoing challenge between focus and the world that happens around us, just as it does.
I am fairly sure being human at least in part means standing at the market with the deafening noises in the background. Part of the package deal.
Hace un par de días estaba agotada y no podía dormir. Me pareció la metáfora perfecta del ser humano.
Hubo algo que me hizo pensar unos días después.
Ayer, estaba de pie en el mercado de Belén, en Iquitos, intentando comprar pescado a una mujer llamada Blanca. La he visto varias veces en el último mes. Detrás de nosotras había un hombre afilando cuchillos manualmente. Su afilado era tan ensordecedor que Blanca tuvo que gritarle que parara para que yo pudiera decidir qué pescado quería.
Esto también me parece un buen ejemplo.
Estar en un lugar con la intención de hacer algo con un afilador de cuchillos chillando que evade tus sentidos y te impide escuchar algo. El desafío continuo entre el enfoque y el mundo que sucede a nuestro alrededor, tal como sucede.
Estoy bastante segura de que ser humano significa, al menos en parte, estar en el mercado con los ruidos ensordecedores de fondo. Es parte del paquete.